En USA la batalla por el «blending learning» en las escuelas está ya desatada entre los grandes de la Informática, Apple y Google. Apple a través de su Ipad y Ipad mini parecía haber cogido ventaja, numerosas «apps» de interés educativo se han ido publicando y muchos colegios han adoptado estos aparatos como sustitutos de los libros de texto y de los cuadernos de clase.
El negocio está bien montado, Apple, por su parte vende los Ipad, uno de los mejores inventos de los últimos años, y lo dice, con conocimiento de causa alguien que no se separa de su Ipad casi nunca. Lo uso para leer la prensa, para leer el correo, para curiosear en facebook, para ver el tiempo que va a hacer, para ver vídeos de youtube o de vimeo, para planificar viajes, etc. Insisto en que el Ipad es uno de los inventos más relevantes de los últimos años.
Bueno cualquiera que tenga un Ipad o un Iphone, sabe que una gran parte del negocio es la llamada «App Store», una tienda «on line» desde la que bajar pequeñas aplicaciones llamadas «apps». Muchas son gratuitas y otras de pago. Hace unos días se publicaba que se han hecho 50.000 millones de descargas de estas pequeñas aplicaciones desde la Appstore. No está mal, es evidente que es un negocio tremendo y que muchas empresas e incluso programadores independientes se han lanzado con éxito desigual al negocio. Si se consigue extender a las escuelas con libros digitales y aplicaciones educativas, el negocio irá en aumento al abrir un nuevo «nicho».
Google y Samsung vieron pronto que ahí había negocio y se lanzaron a una guerra sin cuartel contra Apple para coger su parte del pastel. Google lo hizo desarrollando Android, un sistema operativo alternativo al IOS que llevan los Ipad e Iphone y Samsung poniendo a la venta tablets alternativos al Ipad y teléfonos competidores del Iphone, tan parecidos que ambas empresas llevan ya un montón de enfrentamientos en los tribunales por las patentes, plagios y demás. Samsung utiliza Android como sistema operativo.
Google abrió para su sistema operativo su propia tienda de aplicaciones GooglePlay, de la que se surten los usuarios de aparatos que lleven el sistema operativo Android. Los Samsung ya mencionados pero también otros fabricantes cono HTC, e incluso el propio Google que ha lanzado su propia tablet, la Nexus, precisamente con la que pretende entrar en el negocio educativo.
Bueno pues ahora Google ha decidido entrar en la guerra de las aplicaciones educativas creando «Google play for education», una tienda virtual de aplicaciones educativas bajo Android para el sistema escolar norteamericano que esperan que funcione el próximo curso. Es muy interesante para nosotros conocer cómo funcionan las cosas en ése país que, al final, es en que acabamos mirándonos. De entrada, en USA existe una cosa parecida al «Diseño Curricular Base» que tuvimos aquí con la LOGSE y que consiste en el llamado CORE, no son siglas, significa que hay un núcleo común de contenidos para todo el país. Sí, los 54 estados americanos no tiene problema para ponerse de acuerdo en esto. Cataluña y demás «naciones» prefieren no mirar en esta ocasión para ése lado.
Y volviendo a los aparatos para el sistema educativo, aunque sea en una menor escala, de momento, Sony también anuncia la aparición de su propio cuaderno digital.
¿Y aquí en España?
Buena pregunta… El mercado escolar actualmente está «copado» por una serie de editoriales «de toda la vida», que durante muchos años han hecho un pingüe negocio con los libros escolares. Los libros de texto en papel, actuales, tienen muchos inconvenientes, por lo que hace tiempo que consideramos que sus días están contados: Son muy pesados, recordemos las famosas «mochilas», son muy caros, las actualizaciones significan nuevas ediciones…
Las editoriales citadas son muy conscientes de esto y de que el mundo digital las va arrasar, pero para intentar perpetuarse un poco más, maquillan sus productos añadiéndoles algunas posibilidades en red. Pero creemos que el libro de texto actual es, en cierto modo incompatible con lo que se avecina.
Porque lo que se avecina es que el alumno lleve a clase un único dispositivo, un tablet, que, aunque de momento es caro, en la práctica viene a costar menos que todos los libros de texto de un sólo curso académico. Con ese libro de texto usará materiales didácticos, bien como apps, bien como cursos «on line» de «blended learning», es decir cursos hechos para complementar el trabajo de clase como hace, o debería hacer, el libro de texto.
En Investea estamos trabajando en esta dirección pasando nuestros materiales en papel a formato digital y, al mismo tiempo, elaborando los cursos digitales que se corresponden con esos materiales.
De esta forma, los alumnos que utilizan en sus aulas los materiales del proyecto Cambio 2, tendrán acceso a esos mismos materiales en formato digital y al mismo curso en nuestra aula Moodle. Así podrán realizar ejercicios, fijar contenidos, trabajar en casa, etc.
El reto es fascinante. En el curso que empieza esperamos ver los primeros resultados.